La Micropigmentación es una técnica de maquillaje semipermanente. Consiste en la implantación, en las capas más superficiales de la piel, de pigmentos con el objetivo de corregir, embellecer rasgos faciales y resaltar ojos, labios o cejas de manera temporal.
Su duración puede oscilar entre 1 y 2 años, dependiendo de la zona en la que elegida, los colores utilizados, el cuidado con el sol y los cosméticos utilizados con posterioridad.
En los labios, la Micropigmentación se utiliza para aportar diferentes efectos: dar volumen, color y definición. Consigue mejorar el contorno, definiendo el perfil, puede ensanchar o dar volumen y puede corregir asimetrías.
La sesión de microblading suele ser de aproximadamente 90 minutos. Antes de comenzar el “pintado”, se realiza un diseño preliminar para conseguir una simetría perfecta.
La Micropigmentación de ojos, el delineado permanente de ojos (eyeliner), consiste en pigmentar las líneas superiores, inferiores o ambas. Su objetivo es remarcar las líneas que define en ojo, la zona de las pestañas y la parte inferior del párpado. El efecto óptico Eyeliner realza el aspecto del ojo y consigue dar más profundidad de la mirada.
El objetivo de la Micropigmentación en ojos es rejuvenecer la expresión facial, dar luminosidad a la mirada, corregir ojos caídos o dar un efecto voluminoso de las pestañas.
La sesión de micropigmentación dura aproximadamente entre 90 y 120 minutos. Al mes de esa primera sesión, para mantener los efectos del pigmento reabsorbido en la primera sesión, se precisa un repaso, que tiene una duración aproximada de 60 minutos. La cicatrización es bastante rápida y requiere pocos cuidados posteriores.
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