Se trata de un tratamiento estético reductor que se conoce como una liposucción sin cirugía. Busca, por tanto, eliminar los depósitos de grasa sin invadir el organismo con el objetivo de moldear la figura.
¿En qué consiste?
La cavitación es una técnica no quirúrgica que consigue eliminar la grasa localizada mediante el uso de ultrasonidos de baja frecuencia. Al aplicarlos sobre la zona donde se concentra la grasa, consigue romper y disolver las células adiposas desde su interior. La grasa desprendida se elimina posteriormente con la orina o a través del sistema linfático.
La cavitación no es un tratamiento concebido para bajar de peso, sino para modelar el cuerpo. Se recomienda sobre todo para acabar con la grasa localizada en brazos, caderas, abdomen, espalda, flancos, glúteos, piernas, espalda y rodillas que no se elimina ni con dietas, ni con ejercicio ni con otros tratamientos estéticos.
- Tratamiento indoloro
- No invasivo
- Elimina la piel de naranja y las toxinas
- Mejora la circulación
- Rejuvenece la piel al aumentar el tono y la elasticidad de los tejidos
- Reincorporación inmediata a la vida cotidiana
¿Cómo se realiza el tratamiento?
Normalmente, para conseguir los resultados deseados, se necesitan aproximadamente unas 10/12 sesiones de 45 minutos, realizadas con un intervalo de 3 días entre cada una de ellas. Después de cada sesión se recomienda utilizar técnicas de drenaje (masaje manual o presoterapia) para facilitar la eliminación de las células grasas y evitar que se reabsorban de nuevo. Con el fin de ayudar a la eliminación de grasa y toxinas, antes y después de cada sesión, se recomienda beber 1,5 litros de agua.
Es un tratamiento totalmente indoloro dado que utiliza los ultrasonidos para llegar a las células más escondidas y extraer la grasa del área tratada. Los ultrasonidos penetran, en forma de cavidades, en el organismo hasta “hacer explotar” las moléculas grasas. El objetivo es que la grasa y el líquido tóxico de su interior se dirijan al sistema linfático para ser eliminados del cuerpo.
Es el propio drenaje del cuerpo el que deberá expulsar esa grasa a través de la orina, normalmente, aunque se recomienda aplicar masajes manuales o presoterapia con aparatología que estimula el correcto drenaje linfático y mejora el aspecto terso de la piel.
Además, el consumo de agua y una dieta hipocalórica son claves necesarias para el éxito del tratamiento.
Por último, sólo es necesario indicar que la ultracavitación no tiene efectos secundarios ya que al no requerir anestesia ni cirugía, no existen riesgos.
Pese a ello, no es recomendable ni beneficioso para personas con problemas de corazón, embarazadas o con prótesis y otras enfermedades en la zona a tratar.